jueves, 12 de marzo de 2009

Variación Opus 33 sobre el tema de don Juan

Don Juan era ya anciano. (También los don juanes llegan a ser ancianos, pero son siempre ancianos que sonríen).
Cierto día lo buscó un aprendiz de seductor.

-Maestro —le preguntó con ansiedad—. ¿Cuál fue tu gran secreto para seducir?

-Si te lo digo —le preguntó don Juan— ¿me prometes que a nadie más se lo dirás?

-¡Lo prometo, maestro, lo prometo! —juró aún más ansioso el aprendiz de seductor.

Don Juan, entonces, le hizo seña de que se inclinara sobre él, y le dijo en voz baja al oído:
-Mi gran secreto de seductor fue dejarme seducir.

¡Hasta mañana!...

No hay comentarios: